martes, 20 de noviembre de 2012

Monja robó 128 "lucas verdes" y se las "escolaseó"

La novicia yanqui de 67 años hurtaba las limosnas de dos Iglesias en el condado de Orange durante 2006 y 2010, y se las jugaba en el casino. El insólito caso generó la sorpresa de los fiscales y de los ciudadanos.
Mary Ann Rapp
La hermana Mary Ann Rapp utilizaba el dinero recaudado en las limosnas de las iglesias St. Mary y St. Mark, en el condado Orange, para "patinársela" toda en el casino.

El insólito hecho, que ocurrió entre 2006 y 2010, comenzó a investigarse luego de que el reverendo Mark Noonan denunciara que le faltaron unos 128 mil dólares en total de lo recaudado con las limosnas.

Las autoridades están atónitas. "Soy fiscal del distrito desde 1992 y no recuerdo un sólo caso de monja acusada de nada. Odiaría decir que este caso es una muestra del signo de los tiempos. Me gustaría pensar que simplemente ahora somos más transparentes", admitió el procurador Joseph Cardone.

Casos similares

En 2007, el gerente de una iglesia de Tonowanda, Nueva York, “recaudó” casi medio millón de dólares a lo largo de seis meses para darse una vida lujosa.


Un año después, el administrador de una parroquia de Cheektowaga, en el mismo estado, firmó cheques del templo para sí mismo por 400 mil dólares.


En 2009, el padre Norman Sullivan robó durante 8 años unos 200 mil dólares de una iglesia, también en esa ciudad.

Fuente: Cronica

miércoles, 7 de noviembre de 2012

Cura pedófilo pasea por la calle lo más pancho

Mario Napoleón Sasso
El ex sacerdote de Pilar, Mario Napoleón Sasso, uno de los primeros párrocos condenados en el país por abuso de menores, fue beneficiado con salidas transitorias. El fallo con el permiso lleva las firmas de los jueces Celia Margarita Vázquez y Gustavo Herbel.
El Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 1 de San Isidro, que en 2007 condenó a Sasso a 17 años de prisión por abusar en la capilla a cinco niñas de entre 7 y 14 años, planteó su oposición al beneficio, pero por orden de sus superiores de la Cámara, las salidas comenzaron a efectivizarse desde la semana pasada.

Las fuentes indicaron que al menos, el TOC 1 logró que Sasso tenga el beneficio mínimo, que es una salida transitoria de 24 horas al mes y que puso como garante de las mismas a la actual esposa del condenado, Argentina Graciela Inés Miño, con quien se casó en 2007 mientras esperaba en prisión el juicio oral.
Las salidas transitorias de 24 horas al mes serán en el domicilio de Miño, en la ciudad de La Plata, según informaron los voceros judiciales.

Sasso logró las salidas transitorias porque cumplió este año la mitad de su condena, ya que la Cámara de Casación le redujo la pena impuesta en en el juicio a 16 años de cárcel y lleva 8 detenido desde 2004.
En el juicio oral, se demostró que entre 2002 y 2003, Sasso único sacerdote de la capilla San Miguel de La Lonja, donde funcionaba un comedor, les ofrecía a las niñas caramelos y las invitaba a ver televisión a su habitación, donde las desvestía, manoseaba y se masturbaba delante de ellas.

La policía secuestró en el lugar profilácticos usados y pornografía infantil que el cura tenía almacenada en su computadora y en revistas pedófilas y, según se comprobó en el debate, les hacía ver a las nenas mientras las abusaba.

Al finalizar el juicio, el TOC 1 de San Isidro lo condenó por “abuso sexual doblemente calificado en razón del sometimiento sexual ultrajante para las víctimas y por su condición de ministro de un culto religioso”.
La causa se inició en novimebre de 2003 con la denuncia de una catequista de la parroquia, quien se enteró de la situación por el relato de una de las nenas.

El por entonces fiscal de Pilar Enrique Ferrari -hoy juez en Lomas de Zamora-, y el juez de Garantías de San Isidro Orlando Díaz, libraron una orden de captura sobre Sasso, que recién se efectivizó el 20 de enero de 2004.

El sacerdote eludió durante más de un mes y medio la orden de captura internacional dictada en su contra, modificó su fisonomía para no ser reconocido y viajó a Paraguay, donde permaneció unos diez días prófugo, tras los cuales regresó al país y fue detenido.

Sasso ya tenía antecedentes clínicos de pedofilia en la diócesis de San Juan, provincia de donde es oriundo, por lo que las autoridades eclesiásticas lo habían enviado a hacer un tratamiento entre 1996 y 1998 en la Domus Mariae de Tortuguitas, una institución donde son albergados sacerdotes con problemas de conducta.

Fuente: Diario Crónica