La conmoción en México continuó cuando el arzobispo permitió que el cura siguiera ocupando su cargo, además de castigar y remover a quienes se hicieran eco de las denuncias.
Pero todo cambió desde el momento en que se realizó la última denuncia por parte de un padre, que acusa al cura de haber abusado de su hijo en 2006, año en que había sido enviado como acólito a la parroquia donde oficiaba Silvestre. En la denuncia también se aclara que el joven, tras ese suceso, intentó suicidarse en al menos dos ocasiones.
En las denuncias hay un factor que se repite, que es lograr la confianza de los jóvenes, emborracharlos y recién en ese momento cometer el abuso, como lo muestran los diferentes testimonios reunidos por los arzobispos que luego fueron separados.
El 17 de febrero de 2011, la Sagrada Congregación para la Doctrina de la Fe exculpó desde Ciudad del Vaticano a Gerardo Silvestre ("no pesa denuncia verosímil" en su contra) y al arzobispo Chávez Botello.
1 comentario:
Siempre he sido fiel a Dios mas no a la Iglesia, ya que solo voy cuando me nace, pero jamas he sido de besarle la mano a ningun sacerdote, pues siempre he pensado que son un asco, ya que he tenido de cerca a uno y realmente son una mierda, no todos, pero tristemente la mayoria si lo son, al igual que las acusaciones siempre son verdad y el Vaticano siempre lo negara, claro esta si tu no vas a la iglesia quien chingados le dejara la limosna, lismonas que los ha enriquecido, pues no olviden que el pueblo los mantiene y que a parte el vaticano es proveedor numero 1 en armas para la guerra!
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